¿Qué precauciones hay que tomar al sustituir un aceite no biodegradable por un aceite biodegradable?
Un aceite biodegradable puede elegirse por diferentes motivos: mayor respeto por el medio ambiente, deseo de cumplir los criterios de una etiqueta medioambiental, una norma (por ejemplo, ISO 14001) o una reglamentación. Para cumplir los requisitos de la norma ISO 15380 y ser considerado biodegradable, un aceite no debe contener más del 2 % de no biodegradable. Para garantizar que no se supere este umbral tan bajo, es necesario realizar un lavado sistemático de la instalación al cambiar a un lubricante biodegradable.
El procedimiento utilizado debe eliminar la mayor cantidad posible de lubricante antiguo, en función del tipo de equipo en cuestión: caja de cambios, con o sin circulación de aceite, circuito hidráulico, compresor, etc.
Además, la mayoría de los aceites biodegradables están formulados a partir de ésteres. Aunque los ésteres son generalmente compatibles con los aceites minerales y los aceites sintéticos a base de PAO, sus propiedades de disolución limitan su compatibilidad con los elastómeros. Por lo tanto, dependiendo del producto seleccionado, su compatibilidad con las juntas y la pintura del equipo debe validarse con el fabricante.