¿Cuáles son las restricciones que hay que tener en cuenta al utilizar un aceite en una zona ATEX?
Algunas industrias, por su naturaleza, están sujetas a un riesgo de explosión particularmente alto.
Para que se produzca la combustión, se requieren los tres elementos siguientes:
- combustible en forma finamente dispersa (vapor, gas, polvo, niebla, etc.). El aceite sólo puede desempeñar esta función cuando se utiliza a temperaturas superiores a su punto de inflamación. Esto sólo ocurre en los circuitos de transferencia de calor, que deben ser objeto de un análisis de riesgo específico.
- un oxidante, normalmente el oxígeno del aire
- una fuente de ignición que proporcione la energía mínima de ignición
En la industria, el oxidante suele ser el oxígeno del aire y el combustible suele ser el utilizado en el proceso de fabricación: gas, vapor, polvo, etc. El objetivo de las normas relativas a los equipos destinados a ser utilizados en zonas ATEX es evitar que se introduzca una fuente de ignición en ellos mediante el uso de equipos especialmente protegidos en estas zonas.
Aunque no existen aceites específicamente formulados para su uso en zonas ATEX, los aceites desempeñan un papel especialmente importante en el aislamiento de determinados equipos, como los transformadores eléctricos o los motores eléctricos sumergidos en aceite. En estos casos, conviene comprobar que la tensión de ruptura del lubricante sea la adecuada. En los sistemas de circulación de aceite utilizados en zonas ATEX, se deben evitar las descargas electrostáticas si el aceite utilizado tiene una conductividad baja.